Izanami Martínez, Presidenta de la Asociación Española de Startups y CEO de Doctor24, gracias a su amplia experiencia, aporta un punto de vista novedoso sobre la gestión de equipos de una startup, así como de la G de Digital, acorde con la dinámica del Update.
Continuamos entrevistando a los ponentes del Update del 20 de Octubre “La Organización del s.XXI: Ágil Inteligente y Digital” que organiza la Asociación Centro de Dirección de Recursos Humanos.
Lo más importante de su trabajo como CEO, nos comenta, es mantener animado y motivado al equipo, a los inversores, a los proveedores, a los potenciales clientes, a los partners, porque es la clave de que un proyecto salga adelante y de que todo el mundo confíe en lo que se está haciendo.
“Mi trabajo como CEO es ayudar a todo el mundo a que encuentre la motivación y dé lo mejor de sí”
Respecto a la adaptación de las empresa españolas a esta nueva “era digital”, Izanami considera que está costando un poco, es decir, va avanzando y se ven empresas que van implementando horarios flexibles o teletrabajo, pero hay todavía algunas reticencias. “Nosotros por ejemplo, tenemos un horario 100% flexible, sin baremos de entrada ni baremos de salida, es una medición del desempeño por el trabajo que hacen”. Hoy en día, a empresas más grandes, empresas con culturas más arraigadas, les está costando esa adaptación. “Por ejemplo, el producto que ofrecemos a las empresas en Doctor24 es un servicio de telemedicina, que permite a los trabajadores que, desde su mismo puesto de trabajo, puedan ver a un médico sin tener que desplazarse. Está muy en línea con toda esa cantidad de innovaciones y digitalización que hay, y que se puede aplicar al ámbito laboral, que estamos las startups llevándoles a las grandes empresas para ayudarles a cambiar esa cultura”.
Una startup es peculiar en varios aspectos, el principal es que son empresas de muy alto riesgo, según nos comenta Izanami, con escasos recursos y muchas deficiencias a la hora de conseguir lanzar un producto. Además, una startup se caracteriza por que está probando un modelo de negocio que no se ha probado nunca o está utilizando una tecnología que no se ha utilizado antes. A esto, le sumamos que “no tenemos un departamento de recursos humanos, por lo que será tarea del CEO realizar procesos de selección y conseguir un equipo motivado, porque, la única forma que tienes de hacer funcionar ese modelo de negocio y de alcanzar el éxito es teniendo un buen equipo”.
Nos damos cuenta enseguida de que esta nueva generación de trabajadores es muy diferente y tiene unas motivaciones muy distintas a la generación anterior. Para los “millennials” hay cosas más valiosas que tener una estabilidad en el trabajo. Es mucho más importante poder conciliar la vida personal con la vida profesional, que la oficina esté cerca de casa, tener unos horarios flexibles y no tener que pedir permiso para ir al médico o al banco.
“Yo creo que las empresas muy grandes están fallando en saber ofrecer puestos atractivos para este tipo de perfiles”.
“La digitalización ha hecho que estar en un sitio quietos, sentados durante 8 horas de pronto empiece a perder sentido y que seamos capaces de trabajar con mucha más libertad”. Es, afirma Izanami, un reto que tienen las grandes empresas para integrar, para ser más atractivas a todo este talento nuevo que ni se plantearían, por ahora, ir a trabajar a una gran empresa.
Le preguntamos a la ponente por una experiencia personal/profesional que hubiese marcado un antes y un después en su carrera y en su manera de ver a los trabajadores. Nos contó lo que le ocurrió en su anterior startup. Un día, se le ocurrió la “maravillosa” idea de tener despacho, “dije, ya soy jefa, tengo 36 empleados, ya puedo tener un despacho, que me lo he ganado”. Y se puso un despacho. En esa época, además, pasaba solo uno o dos días a la semana por la oficina porque estaba buscando financiación. Así, perdió totalmente el contacto con el equipo, y pasaron varios meses hasta que, de pronto, en una misma semana, dos de sus mejores empleados le dijeron que dejaban su puesto, sin tener otra oferta de trabajo en las manos. “Vi que eso tenía que ser síntoma de que algo muy grave estaba pasando”. Empezó a investigar, a hablar con todas las personas del equipo hasta que descubrió que tenían un compañero que se había dedicado a contaminar el ambiente de trabajo “y todo eso había pasado porque yo había perdido la conexión con el equipo al meterme en ese despacho y al no pisar la oficina más de dos días a la semana”. Ese episodio le sirvió para recordarle que su trabajo era estar con el equipo y ayudarles a desarrollarse profesionalmente y a mantenerles motivados.
Con esto, para Izanami, lo más importante para que una empresa funcione exitosamente y logre alcanzar sus objetivos es tener un buen equipo. Y la mejor forma de tener al equipo motivado es encontrar el lugar perfecto para cada uno de ellos.
“Si tienes a cada trabajador haciendo su pasión, van a estar contentos, van a estar felices y van a estar motivados”