Tus hábitos, un día cualquiera
Autor: Ignacio de Jorge Culture & leadership agile transformation Moebius Consulting Piensa en un día desde que te levantas. Te preparas, inicias tu jornada de trabajo, hablas con un cliente, haces la daily de equipo, das pautas a un colaborador. El día sigue y al final de la jornada, si miras atrás verás que el 40% de tus comportamientos tienen algo en común. Son automáticos, no tienes que pensar en ellos ni tomar ninguna decisión. Y sin embargo, determinan en buena medida tu éxito o fracaso profesional. Son lo que llamamos hábitos. Nacen como elección y se convierten en patrones automáticos de conducta. Es el gran recurso de nuestro cerebro para ampliar nuestra capacidad, ahorrando energía para poder dedicarla a otras cosas. Sin ellos nuestro cerebro sencillamente dejaría de funcionar. Los hábitos son un factor determinante del alto rendimiento, en cualquier disciplina. Cuando analizamos un rendimiento excepcional, no encontramos grandes momentos definitorios que aparecen aisladamente, sino un conjunto de pequeñas mejoras generadas por hábitos cotidianos. Pequeñas mejoras del 1% durante un año nos harán 37 veces mejores al final del período. Por eso se dice que los hábitos son el interés compuesto de la mejora personal. Además, tienen la particularidad de que el proceso de formación de un hábito requiere esfuerzo en su fase inicial, y no producen resultado hasta que superan un umbral de actividad. Un hábito sólo se consolida cuando su recompensa supera el esfuerzo que requieren. Muchos buenos hábitos mueren en la orilla. Estos dos rasgos hacen tan difícil el entramiento en hábitos. Eso y que hasta ahora no conocíamos cómo funcionaban. Pero las cosas han cambiado. La neurociencia avanza a pasos de gigante y desde hace años presta mucha atención